Carlos Alberto Arroyo del Río

(Guayaquil, 1894 - 1969) Político ecuatoriano que fue presidente de la República desde 1940 hasta 1944. El gobierno de Carlos Alberto Arroyo del Río hubo de afrontar uno de los momentos más dramáticos de la historia ecuatoriana contemporánea.


Carlos Alberto Arroyo del Río

Carlos Arroyo del Río nació en Guayaquil, en el seno de una familia aristocrática, en 1893. Cursó estudios de leyes en la capital, y emprendió una brillante carrera política que lo llevó muy joven al Congreso. Tras alcanzar la jefatura del Partido Liberal, en las elecciones de 1940 fue elegido presidente para un período de cuatro años.

El problema más grave al que debió enfrentarse Carlos Arroyo del Río durante su mandato fue el contencioso limítrofe que el Ecuador sostenía con el Perú, su vecino del sur. El conflicto alcanzó su momento más tenso con la invasión peruana de la provincia del Oro (11 de julio de 1941). Tras una serie de derrotas, el 29 de enero de 1942 se firmó el protocolo de paz de Río de Janeiro.

Desde su misma elección, las sospechas de fraude electoral habían lastrado la presidencia de Arroyo. Tras el descalabro militar y el forzado armisticio (que supuso la pérdida de 278.000 kilómetros cuadrados de territorio, casi la mitad de la superficie del país), la opinión pública culpó al presidente del desastre por su negativa a aceptar un gobierno de unidad nacional durante el período bélico, acusándolo además de pretender aprovechar la crisis en beneficio político propio.

Con este trauma nacional a cuestas, el gobierno extremó las medidas de control y seguridad internas, para lo cual fortaleció el Cuerpo de Carabineros (hoy Policía Nacional). Todo ello agravó el clima de descontento y dio lugar a un amplio movimiento social y político en contra de Carlos Arroyo. Conservadores y comunistas, trabajadores y empresarios, civiles y militares llegaron a un acuerdo para expulsarlo de la presidencia.

Organizados bajo la bandera de Acción Democrática Ecuatoriana (ADE), el movimiento se transformó en insurrección el 28 de mayo de 1944 y depuso a Arroyo. Este gigantesco pronunciamiento nacional, que aclamaría a José María Velasco Ibarra como nuevo presidente, pasó a la historia con el nombre de «La Gloriosa». Carlos Arroyo partió al exilio; sin embargo, regresó al poco tiempo y, acusado de conspiración, fue detenido en 1955. Tras su liberación se apartó de la vida política pública y ejerció la abogacía.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].