Familia Gracos

Familia plebeya romana a la que pertenecieron varios políticos, cuyas reformas dieron comienzo a una larga época de luchas civiles en la Roma republicana. Tiberio Sempronio Graco (210-150 a. C.) fue tribuno de la plebe (187) y cónsul (177 y 163). Como pretor de Hispania participó en la lucha para someter a los celtíberos (180); también colaboró en la represión de una sublevación en Cerdeña. De su matrimonio con una hija de Escipión el Africano nacieron sus dos hijos; el primero de ellos, Tiberio Sempronio Graco (162-133 a. C.), también fue pretor en Hispania, donde asistió a la derrota romana frente a Numancia y negoció una capitulación posteriormente desautorizada por el Senado (137).

Elegido tribuno de la plebe (133), Tiberio Sempronio Graco impulsó una reforma agraria consistente en limitar el tamaño de los latifundios instalados sobre el ager publicus (tierras comunales) y repartir la tierra restante entre el proletariado romano, a fin de incrementar la masa de pequeños campesinos propietarios. Este proyecto suscitó grandes oposiciones, incrementadas cuando Graco pareció ambicionar un poder personal contrario a los usos políticos de la República, destituyendo al otro tribuno de la plebe, constituyendo un triunvirato agrario con su hermano y su cuñado y presentándose para ser reelegido; la oposición senatorial, dirigida por el pontífice máximo Escipión Násicam, organizó un complot en el que fueron asesinados Graco y unos 300 partidarios.


Los hermanos Graco

Su hermano Cayo Sempronio Graco (154-121 a. C.) continuó su carrera política bajo la reacción de los patricios que siguió al asesinato de Tiberio, cuya labor reformadora continuó. Fue cuestor en Cerdeña (126) y tribuno de la plebe (123-122). Dotado de una elocuencia política excepcional, fue el jefe de filas de los reformistas contra los conservadores, encabezados por su cuñado Escipión Emiliano. Cayo puso en práctica las reformas agrarias de su hermano, completándolas con un programa político encaminado a debilitar al Senado; acabó de ganarse a la plebe de la ciudad garantizándoles el suministro de grano a bajo precio; y, para obtener además el apoyo de los caballeros, les atribuyó funciones judiciales arrebatadas a los senadores (Lex judiciaria).

Pero su posición quedó debilitada por el proyecto de extender la ciudadanía romana a los latinos y pueblos aliados, lo que levantó recelos entre el pueblo; este descrédito fue aprovechado por la clase senatorial para lanzar una ofensiva que detuviera las reformas de Graco. Derrotado en la elección tribunicia para el año 121, sus partidarios se rebelaron haciéndose fuertes en el Aventino; el Senado declaró el estado de sitio y lanzó una sangrienta represión en la que murieron Graco y unos 3.000 partidarios.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].