Pipino el Breve

Rey de los francos, primero de la dinastía Carolingia. (Jupille, Bélgica, h. 715 - Saint-Denis, Francia, 768). Era hijo de Carlos Martel, que le dejó en herencia el poder político que los Carolingios ejercían bajo los reyes Merovingios como mayordomos de sus palacios. Pipino recibió en el 741 Neustria, Borgoña y Provenza, mientras que su hermano menor, Carlomán, recibía Austrasia, Suabia y Turingia; los restantes territorios eran compartidos.


Pipino el Breve

Pero en 747 Carlomán ingresó en un monasterio, de manera que Pipino el Breve quedó como único dueño del poder. Apoyándose en una estrecha alianza con el papa Zacarías, en el 751 decidió deponer por incapacidad al último rey Merovingio, Childerico III, y hacerse proclamar rey de los francos en Soissons.

Tras haber reorganizado la Iglesia en sus reinos, Pipino terminó de saldar su deuda con el Papado auxiliándole en dos campañas militares contra sus enemigos lombardos (754 y 756). El papa Esteban II le coronó y le nombró «protector de los romanos» en el 754 (paso importante para las futuras veleidades imperiales de los Carolingios) y Pipino, a cambio, entregó al papa los territorios de la Pentápolis y el Exarcado de Rávena que había arrebatado a los lombardos, dando así origen a los Estados Pontificios (Donación de Pipino, 756).

Por otro lado, prosiguió la política expansionista de sus predecesores, extendiendo las fronteras del reino franco a costa de los sajones y de los árabes (a quienes arrebató la Septimania); Pipino el Breve reafirmó asimismo su dominio sobre Aquitania y redujo Baviera a vasallaje. Con todo ello dejó preparado el terreno para la obra de su hijo y sucesor, Carlomagno.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].