Baquílides

(Ceos, c. 520 a.C. - c. 452 a.C.) Poeta lírico griego. Sobrino del poeta Simónides, Baquílides debió seguir a su tío en su peregrinación por cortes y ciudades: primero a Tesalia y luego a Atenas, Egina y por último a Siracusa, donde gozó de la protección del tirano Hierón de Siracusa.

Se desconoce el lugar adonde se dirigió el poeta una vez muerto el tirano (467 a.C.); probablemente debe situarse en este período su destierro en el Peloponeso, del que nos da una vaga noticia Plutarco, pero cuyas razones y duración ignoramos; sin embargo, se sabe con certeza que el poeta volvió a Ceos y que residió en su patria los últimos años de su vida.

Toda su actividad poética pertenece a la primera mitad del siglo V a.C. El más antiguo de sus poemas con fecha cierta, dedicado a Piteas de Egina, es del año 485. En el año 452 compuso el sexto epinicio, dedicado a la victoria en el estadio de Olimpia de Lacón, un muchacho de Ceos; después de esta fecha no se tiene más noticia del poeta, que, presumiblemente, murió poco más tarde.

La poesía de Baquílides

Los alejandrinos incluyeron a Baquílides en el noveno lugar del canon de los grandes líricos y ordenaron su obra en nueve libros. Seis de éstos reunían poemas para el culto, en tanto que los tres restantes, bajo los títulos de Epinicios, Cantos eróticos y Encomios, contenían cantos a diversas personalidades. No se conserva ninguno de ellos; de hecho, a finales del siglo XIX solamente se conocían unos breves fragmentos de sus poemas. Pero en 1896 se hallaron dos papiros egipcios con veinte poemas suyos: catorce epinicios (odas triunfales) y seis ditirambos (cantos lírico-corales de contenido narrativo). Aunque algunas de estas composiciones presentan considerables lagunas, muchas aparecen enteras o casi enteras, hecho que hace que Baquílides resulte ser el poeta lírico-coral mejor conocido después de Píndaro.

Los epinicios son cantos corales de diversa extensión (de los 16 versos del VI a los 231 del XIII) compuestos para celebrar victorias atléticas en las competiciones panhelénicas (para Argeyo de Ceos, vencedor en los juegos ístmicos; para Gerón de Siracusa, vencedor con los caballos en las luchas olímpicas y píticas, etc.). El esquema de los epinicios de Baquílides no se diferencia substancialmente del de Píndaro. El comienzo es proporcionado por la mención del vencedor, acompañado de las alabanzas suyas y de su ciudad. La lucha no es descrita, sino sólo recordada, generalmente con una sencilla alusión, alguna vez con algún toque más amplio. La mayor parte de la poesía está dedicada a la exposición de un mito que tenga cierta relación genealógica, geográfica o sencillamente ocasional con el atleta celebrado.

Mientras que, en el mito, Píndaro persigue la solemne confirmación de los conceptos religiosos y morales que informan toda la oda, para Baquílides, menos sensible a aquellos problemas y menos inclinado a una reelaboración personal del patrimonio mítico, la leyenda es pretexto para una narración más graciosa que profunda. Sólo en la oda X falta del todo la narración mítica. Al fin el canto se concluye generalmente con una reanudación de las alabanzas al vencedor. Las poesías más notables son la tercera y la quinta: la una evoca la leyenda de Creso, salvado por la intervención divina de la hoguera donde estaba a punto de quemarse con los suyos, para sustraerse a la servidumbre persa; la otra recuerda el encuentro ocurrido en el Hades entre Heracles y Meleagro, y la narración que hace Meleagro de su triste destino.

A los epinicios siguen seis composiciones conocidas con el nombre de ditirambos (cantos corales relativos al culto de Dionisos). En ellos se contiene exclusivamente la narración de un mito: la embajada de Ulises y Menelao a Troya para pedir la restitución de Helena; los celos que tiene Deyanira de Heracles; Teseo y Minos; Teseo y Egeo; las peregrinaciones de Io; la historia de Ida y de Harposa. Particularmente notable es el XVII: el rey de Atenas, Egeo, responde a los ciudadanos atenienses, que constituyen el resto del coro, los cuales lo interrogan acerca de las maravillosas empresas de un joven héroe en marcha hacia Atenas; el joven resulta ser Teseo, hijo del propio rey. En este ditirambo el unísono coral está dividido por un diálogo con evidente analogía con las formas de la poesía dramática, lo que ha permitido hacer comprensible el pasaje de la Poética en el que Aristóteles sostiene que la tragedia tiene su origen en el ditirambo.

El más interesante de los ditirambos, por su perfección y la gracia de su narración, es el XVI: Teseo viaja en una nave hacia Creta, junto con Minos y los siete jóvenes y las siete muchachas que un cruel tributo destinaba cada año al Minotauro. Cuando Minos osa tocar a una de las muchachas, Teseo se le encara alabándose de ser hijo de Neptuno. El rey de Creta lanza entonces un anillo al mar, desafiándole a que lo traiga en prueba de aquel parentesco; Teseo se arroja a las olas y desaparece. Y cuando ya se le supone muerto, el héroe, acogido benignamente en los palacios submarinos, vuelve ileso a flor de agua, adornado por los dones de Afrodita.

Es característica de la manera de hacer de Baquílides la tendencia a escoger el momento culminante de una leyenda y representarlo por sí mismo, sin preocuparse de los antecedentes y el desenlace. Sus evocaciones son más ilustraciones que narraciones, y recuerdan, en sensibilidad y técnica, la pintura. Un antiguo juicio, el del anónimo autor del tratado De lo Sublime, definió a Baquílides como el representante de una impecable mediocridad. En realidad, Baquílides es una personalidad original: incapaz de concepciones geniales, elabora el material tradicional con refinamiento de artista, rico sobre todo en sensaciones visuales y de un gusto decorativo y estilizante. Pero dentro de estos límites produce, especialmente con los ditirambos, joyas de exquisita factura, a las cuales el tiempo no ha quitado nada de su frescura.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].