Enrique III el Negro

(?, 1017-Bodfeld, Harz, 1056) Emperador germánico (1039-1056). Sucedió a su padre, Conrado II. Coronado en Roma (1046), fortaleció su autoridad frente a los señores feudales de Lorena y Baviera. En 1041 logró someter a los eslavos de Bohemia. Se mostró partidario del reformismo eclesiástico y de la orden de Cluny. Su intervención en cuestiones religiosas se cifró en la deposición de tres papas y en el nombramiento de Clemente II, Dámaso II, León IX y Víctor II, todos ellos alemanes fieles a su concepción imperial.