Aureli Maria Escarré

(Arbós, 1908 - Barcelona, 1968) Monje benedictino español. Nombrado prior (1939) y abad (1941) del monasterio de Montserrat, su posición en favor de los derechos de la nacionalidad catalana y de la democracia le enfrentó con el régimen del general Franco. En 1965 tuvo que exiliarse a Milán y en 1966 se vio obligado a renunciar a su cargo de abad. Hombre de acción más que intelectual, dio un gran empuje a las obras de ampliación y reconstrucción del monasterio y del santuario.


Aureli Maria Escarré

Aureli Maria Escarré ingresó en 1923 en el monasterio de Montserrat (Barcelona) y en 1933 fue consagrado sacerdote. Al inicio de la Guerra Civil (1936-1939) se acogió a la ayuda que facilitaba la Generalitat de Catalunya para exiliarse en Italia. Dos años después regresó a España y se instaló en Zaragoza, de donde partió hacia Montserrat en los últimos días de la guerra. A su llegada al monasterio consiguió ser nombrado prior, anticipándose a las designaciones de las autoridades franquistas. Confirmado en el cargo pocos meses después, en 1941 fue nombrado abad coadjutor del titular, el abad Marcet, con quien colaboró activamente en la restauración del monasterio. A su iniciativa se debieron las obras llevadas a cabo en la fachada principal y en las dependencias interiores, la terminación de la sacristía y la remodelación del camarín de la Virgen y del jardín de los religiosos.

Nombrado abad titular tras la muerte de Marcet (1946), se dedicó a promover las actividades culturales e intelectuales y a elevar el nivel de formación de los monjes de la comunidad, mediante el envío de algunos de sus miembros a realizar estudios en el extranjero y apoyando las iniciativas investigadoras sobre temas teológicos y de distintos ámbitos de la cultura. Reactivó las tareas de publicación de la Biblia en catalán, iniciadas por su antecesor, e impulsó la edición de las revistas Germinabit, Qüestions de vida cristiana, Studia Monastica y, sobre todo, Serra d’Or, principal órgano de la abadía de Montserrat, en el que acogió colaboraciones de numerosos intelectuales y artistas catalanes de diverso signo político.

Su actividad en este sentido determinó su progresivo alejamiento de las posturas ideológicas del régimen del general Franco, al que manifestó públicamente su oposición en varios sermones y homilías, como el pronunciado en diciembre de 1958, que acarreó su enfrentamiento con el gobernador Felipe Acedo Colungo y que se distribuyó por Barcelona de forma clandestina. Durante su abadiato, el monasterio de Montserrat se erigió en símbolo de la revitalización del catalanismo, sobre todo a partir de la celebración de los actos de entronización de la Virgen de Montserrat (1947), en los que se expresó la voluntad de afirmación de la personalidad y la cultura catalanas por encima de las diferencias políticas.

Aureli Maria Escarré constituyó uno de los principales exponentes de la oposición al régimen franquista desde finales de la década de 1950 hasta mediados de la siguiente. Recibió al general Franco en la visita que éste realizó a Montserrat en 1960; sin embargo, rehusó asistir a la recepción organizada en su honor en la ciudad de Barcelona, y tras las detenciones realizadas como consecuencia de las manifestaciones pro catalanistas durante su estancia en la ciudad, le envió un mensaje de protesta. En 1961, en atención a su precaria salud, se nombró coadjutor al abad Brassó, tras lo que se redujo su intervención en las tareas de gobierno del monasterio.

Su oposición al régimen culminó con las declaraciones que realizó para el diario Le Monde, en las que manifestó su disconformidad con las estructuras políticas vigentes y criticó a “un régimen que se dice cristiano, pero cuyo Estado no obedece a los principios básicos del cristianismo”. Las declaraciones provocaron una dura reacción por parte de los sectores afines al poder, como los artículos que en contra de su postura publicaron, entre otros, el abad del Valle de los Caídos, Justo Pérez de Urbel; pero surgieron también manifestaciones de apoyo por parte de algunos sectores eclesiásticos, como la carta de adhesión firmada por más de cuatrocientos sacerdotes vascos. Finalmente, Escarré hubo de exiliarse en Italia; en 1965 se trasladó a la abadía milanesa de Viboldone y al año siguiente renunció a su título de abad en favor de Cassià M. Just. Poco antes de morir, fue trasladado a Montserrat por iniciativa del nuevo abad.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].