Beatriz Guido

(Rosario, 1925 - Madrid, 1988) Escritora argentina. Miembro de la generación de los «parricidas», sus obras se centran en la nostalgia de la niñez, los problemas de la adolescencia (Fin de fiesta, 1958), la realidad nacional (El incendio y las vísperas, 1964) y la introspección psicológica (La invitación, 1979).


Beatriz Guido

Beatriz Guido publicó con veintisiete años su primer libro, Regreso a los cielos (1952), y dos años después, con la novela La casa del ángel (1954), obtuvo el premio de la editorial Emecé. A partir de entonces emprendió una prolífica carrera como escritora profesional, paralela a su prolongada labor de guionista cinematográfica. En efecto, buena parte de sus novelas, como la citada La casa del ángel (1954), La caída (1956), Fin de fiesta (1958) y La mano en la trampa (1961), sirvieron de base argumental para las películas homónimas dirigidas por Leopoldo Torre Nilsson.

Su obra se sirve del realismo y de los procedimientos tradicionales de la narración para aludir a aspectos de la historia nacional a través de anécdotas y ambientaciones diversas, de modo que los acontecimientos políticos del país (tanto contemporáneos como del pasado) sirven de trasfondo para los conflictos individuales y las intrigas en las que éstos tienen su origen y destino. Por ejemplo, La casa del ángel (1954) está ubicada en la década de 1920, en tanto que Fin de fiesta (1958) está ambientada en la de 1930; los primeros años del gobierno peronista sirven de trasfondo para El incendio y las vísperas (1964), en tanto que la historia que cuenta Escándalos y soledades (1970) tiene lugar durante el gobierno de Arturo Frondizi; las vísperas del regreso de Juan Domingo Perón constituyen el marco histórico de La invitación (1979). Una de las constantes temáticas de su narrativa es la decadencia de la clase alta, cuyos miembros ven su poder amenazado y se aferran con tenacidad a los símbolos de esa posición ya casi ilusoria.

La aguda capacidad de observación de Beatriz Guido y su notable sentido del ritmo del relato han provocado el efecto paradójico de que sus argumentos parecen más acabados y precisos en las adaptaciones al cine que en las novelas originales. Pero, al mismo tiempo, es indudable que buena parte del interés y de la repercusión internacional de las mejores películas de Torre Nilsson se debe a su sólida base argumental, proporcionada por las novelas y los guiones de la fecunda escritora. Guido participó asimismo en la elaboración de numerosos guiones cinematográficos, entre ellos las adaptaciones de Martín Fierro (1967), sobre el poema de José Hernández; El santo de la espada (1969), a partir del libro homónimo de Ricardo Rojas; y Los siete locos (1973), basada en la novela de Roberto Arlt.

Coetánea de varios de los autores nucleados en torno a la revista Contorno, con los que compartía más de una inquietud, la obra de Guido, sin embargo, está más cerca de Eduardo Mallea que de Roberto Arlt; y más cerca también de las directrices del realismo norteamericano que de las preocupaciones filosóficas y existenciales de la literatura francesa del período. Beatriz Guido falleció en 1988 en España, país en el que se desempeñaba como agregada cultural en la embajada argentina durante el gobierno de Raúl Alfonsín; un año antes había publicado su última novela, Rojo sobre rojo (1987).

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].