Al-Hakam I
(770-822) Emir de Córdoba (796-822). Pasó gran parte de su reinado reprimiendo rebeliones y ataques exteriores, aplastando con dureza las sublevaciones de los muladíes toledanos (807) y del arrabal de Córdoba (817). Luchó en Tortosa (809) y Barcelona (813) contra los francos, a los que impidió establecer la frontera en el Ebro, aunque no pudo recuperar Barcelona. Tampoco pudo evitar que se independizaran en las montañas los núcleos cristianos de Navarra y Aragón.