János Kádár

(Fiume, 1912 - Budapest, 1989) Político húngaro, primer ministro en dos ocasiones (1956-1958, 1961-1965). Hijo de una sirvienta soltera y obrero metalúrgico de profesión, en 1931 se unió a la Federación de Jóvenes Trabajadores Comunistas y al Partido Comunista, que operaban en la clandestinidad. Durante la Segunda Guerra Mundial ayudó a organizar la resistencia armada al régimen del almirante Horthy, aliado del III Reich, por lo que fue arrestado y encarcelado en numerosas ocasiones, tanto por la policía húngara como por las fuerzas de ocupación alemanas. Fue en estos años cuando tomó el apellido de Kádár, en alusión a su labor de resistente.


János Kádár

En 1942 ingresó en el Comité Central del Partido y, tras la guerra, en 1945, fue elegido diputado de la Asamblea Nacional Provisional, subjefe de la Policía y secretario del Comité del Partido en el área de Budapest. En 1946 entró de adjunto en la Secretaría General del Partido y en 1948 continuó en sus funciones en el nuevo Partido Obrero Húngaro (MMP, surgido de la fusión de los partidos socialdemócrata y comunista), a las que añadió la condición de ministro del Interior.

En 1951 fue cesado de todos su cargos, detenido, al parecer torturado y condenado a cuatro años de prisión acusado de "desviacionismo titoísta", en el curso de las purgas lanzadas por el secretario general del MMP y furibundo estalinista, Mátyás Rákosi. Escapó a la suerte corrida por Lázslo Rajk, su compañero desde los tiempos de la guerrilla antinazi y predecesor en el Ministerio del Interior, ejecutado en 1949.

Tras la muerte de Stalin (1953), Kádár, como otros muchos represaliados, recobró la libertad en 1954. Ese mismo año fue nombrado secretario del MMP en el distrito de Budapest y se integró en el gobierno del reformista Imre Nagy. Tenido por amigo y colaborador de Nagy, el 24 de octubre de 1956, con ocasión del nuevo ascenso a la cúpula política de Nagy, fue elegido primer secretario del Partido en sustitución de Ernö Gerö; luego se escondió y el 4 de noviembre reapareció para denunciar la retirada húngara del Pacto de Varsovia y como el hombre escogido por Moscú para restablecer el gobierno comunista.

Calificado de "judas" por los patriotas obligados a exiliarse, Kádár aplicó como primer secretario del nuevo Partido Socialista Obrero Húngaro (MSzMP) y primer ministro severas medidas de represalia, si bien la decisión última de la política que había de seguirse correspondía a la URSS, que tenía ocupado militarmente el país. Probablemente, en su fuero interno Kádár consideraba la represión un mal menor comparado con el desorden de las masas alzadas en armas.

En 1958 Kádár cedió la jefatura del Gobierno a Ferenc Münnich, tomó la cartera de ministro de Estado y recuperó su antiguo escaño en la Asamblea Nacional. Volvió a ejercer de primer ministro entre 1961 y 1965, fecha en que se hizo cargo del puesto Gyula Kállai. Desde comienzos de los sesenta, el régimen de Kádár fue aflojando los controles policiales y aplicando diversas medidas reformistas, en la creencia de que la tolerancia y la benignidad políticas resultaban imprescindibles para superar el trauma de 1956 y conseguir la reconciliación con una ciudadanía amargada y presa del cinismo.

El que vino a llamarse "socialismo gulash", con su apertura a los países occidentales, la adopción de mecanismos económicos de mercado y la permisividad de ciertos usos y costumbres sociales, convirtió a Hungría en el Estado de Europa del Este más próspero y habitable, y adormeció las reivindicaciones de una sociedad que siempre consideró al comunismo una ideología impuesta y extranjera. Por ello, la URSS dejó hacer a Kádár, quien se había ganado su confianza.

Tras más de treinta años de ejercicio austero y mesurado, a Kádár (que sentía aversión al culto a la personalidad e incluso a una presencia inmoderada en los medios de comunicación) le llegó la hora de la jubilación cuando la Perestroika soviética, que tenía sus partidarios en el MSzMP, demandó una renovación doctrinal y de cuadros a los partidos de los países aliados. No sería el anciano Kádár, anclado en la ideología, el encargado de llevar adelante las verdaderas reformas del sistema húngaro, sino el primer ministro K. Grosz, que lo sustituyó al frente del MSzMP el 22 de mayo de 1988.

Kádár, que se había resistido a su relevo, recibió en dudosa compensación el puesto de presidente de honor del Partido, pero el 10 de mayo de 1989 fue igualmente cesado y dado de baja del Comité Central. Poco después, el 6 de julio, falleció de una neumonía en el momento en que el Partido se disponía a implantar una democracia parlamentaria.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].