Gong Li

(Shenyang, 1965) Actriz china, una de las más importantes de la cinematografía asiática de las últimas décadas. Gong Li nació en Shenyang, capital de la provincia china de Liaoning, en el seno de una familia humilde. Aunque suspendió los exámenes en dos ocasiones (lo que siempre ha sido puesto de relieve por sus detractores) logró ser admitida en la Escuela Central de Arte Dramático de Pekín en 1985.


Gong Li

Siendo aún estudiante, el director Zhang Yimou la escogió en 1987 para el papel protagonista de su ópera prima, Sorgo rojo. El éxito de público y crítica fue extraordinario, dentro y fuera de las fronteras chinas. La película obtuvo el Oso de Oro en el Festival Internacional de Cine de Berlín, y dio a conocer al público occidental un nuevo cine asiático que poco o nada tenía que ver con el de los grandes maestros japoneses, el único que hasta entonces había llamado la atención de los aficionados europeos al género de autor.

Cuando, dos años más tarde, Li se graduó en Pekín, era la amante de Yimou y quizás el rostro más popular del cine chino junto a Chow Yun-Fat. Con su mentor estrenó diversos filmes, más o menos inspirados, entre los que destaca sobremanera La linterna roja (1991). Justamente nominada a la mejor película de habla no inglesa por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de Hollywood, cosechó un rosario de galardones que incluyeron a la actriz y al realizador.

Con todo, la que para muchos fue la mejor interpretación de Li la rodó bajo las órdenes de otro director, Chen Kaige, quien también la “adoptó” como actriz fetiche. La impresionante Adiós a mi concubina (1993), similar en ritmo y ambiente a un bello trabajo de la pareja Li/Yimou titulado Qiu Ju, una mujer china, logró también una nominación a los Oscar y una larga lista de premios.

En 1995, después de varios años de relación oficiosa más allá del plató, la actriz rompió con Zhang Yimou. Al hacerse pública la noticia, el escándalo rodeó a la pareja, dado que el director estaba casado con otra mujer. Al cabo de unos meses, Gong Li contrajo matrimonio con Ooi Hoe Soeng, magnate del tabaco, de Singapur. Este acontecimiento conllevó asimismo la ruptura artística de Li y Yimou durante varios años. El último filme que rodaron juntos en mucho tiempo, La joya de Shanghai (1995), no fue precisamente el más atractivo, pero nos mostró una faceta hasta entonces desconocida de Gong Li: su calidad como cantante.

Fue una suerte para Gong Li que para entonces ya no se la asociara únicamente con el director de Sorgo rojo, ya que aunque su trabajo había sido reconocido con premios como los de la Mostra de Venecia y el Círculo de Críticos de Cine de Nueva York, su actividad profesional decreció durante unos años. Entre 1996 y 2004 rodó sólo seis películas, ninguna de ellas demasiado atractiva para el espectador occidental.

Durante este tiempo, Gong Li dedicó gran parte de su tiempo a causas humanitarias. En 1998 prestó su apoyo a la campaña contra el hambre organizada por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura). Dos años más tarde, el Día Mundial de la Alimentación de 2000, la FAO la designó su embajadora. La aceptación de este cargo llevó implícito un incremento de su compromiso personal y profesional con la institución.

Otro ejemplo de su activismo saltó a la prensa en agosto de 2002, cuando Gong Li visitó un proyecto de TeleFood que optimizó las técnicas de cría de patos en la aldea de Xingguang, en la provincia china de Sichuan. La mejora de esta actividad femenina benefició a cerca de 4.500 personas, al aumentar los ingresos de las mujeres y mejorar la alimentación de sus familias.

Fue Wong Kar-wai, el realizador chino más conocido en occidente gracias a obras maestras como Happy Together o Deseando amar, quien devolvió a Gong Li a la actualidad. Al darle en 2004 el papel de Su Li Zhen en su extremadamente preciosista 2046, despertó entre los cinéfilos europeos el recuerdo de la hierática imagen de esta particular actriz. Wong explotó como sólo lo había hecho Zhang Yimou el peculiar estilo de Li, capaz de resistir el impresionante peso escénico de su compañera de reparto Ziyi Zhang.

La espectacular adaptación cinematográfica de Rob Marshall del best-seller Memorias de una geisha, el siguiente trabajo de la actriz, en el papel de la geisha Hatsumomo, supuso el reencuentro con Ziyi Zhang y fue fuente de polémica en China. De entrada, no gustó nada que fueran actrices chinas las encargadas de encarnar los papeles de geisha, oficio tradicionalmente japonés.


Gong Li en Memorias de una geisha (2005)

El enfriamiento de las siempre tensas relaciones entre Pekín y Tokio no favoreció la acogida de la película. Llegó incluso a circular por Internet un falso fotograma del filme en el que podía verse a Ziyi Zhang desnuda bajo el actor nipón Ken Watanabe. La imagen sirvió de justificación al régimen chino para prohibir el estreno del filme, que, con todo, burló la censura al aparecer en edición pirata en DVD. No cabe duda de que su cuidada estética (maquillaje y vestuario optaron al Oscar) favoreció las tareas de promoción en mercados como el estadounidense.

Tras el estreno de Memorias de una geisha, Li volvió a ser noticia al ser nombrada la “china más bella del año” por el diario Beijing News, que cada año publica la lista de los 50 personajes más atractivos del país, relevando a la bellísima Maggie Cheung (Deseando amar) y superando, sorprendentemente, a Zhou Xun (Balzac y la joven costurera china), la actriz más de moda en las pantallas chinas, cuarta clasificada. Es muy posible que en la elección influyera sobremanera la hiperactividad profesional desarrollada por la actriz en los dos últimos años, en los que los proyectos se multiplicaron.

No es extraño que Michael Mann, el director de Alí, la requiriera a principios de 2006 para el rodaje de Miami Vice, basada en la teleserie homónima. Al parecer, rodando el filme en Uruguay, Gong Li adquirió la curiosa costumbre de reemplazar su hasta entonces insustituible té verde chino por el mate, y se llevó grandes cantidades de hierba.

A mediados de año Gong Li se encontraba en plena fase de rodaje de La maldición de la flor de oro, filme en el que la actriz volvía a coincidir con el director Zhang Yimou, y Behind the Mask, película de la serie dedicada al personaje de ficción Hannibal Lecter, dirigida por Peter Webber. Su siguiente trabajo, si no había imprevistos, sería The Yellow M, basada en los héroes del cómic Blake y Mortimer, creados por Edgar P. Jacobs, un proyecto en el que llevaba varios años implicada.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].