Camarón de la Isla

 
Una rápida ascensión. Camarón de la Isla tuvo un rápido reconocimiento: todos los gitanos le señalaron como el más grande desde muy joven. El padrinazgo inicial de Paco de Lucía como acompañante le abrió tantas puertas como la dirección empresarial de Pulpón, que vio en él un filón con mucha veta. Por sí solo, Camarón eclipsó pronto a geniales cantaores contemporáneos, como Pansequito, el Lebrijano o Turronero.