James Callaghan

(Portsmouth, 1912 - Ringmer, 2005) Político británico. Durante los gobiernos laboristas de Harold Wilson ocupó las carteras de ministro de Finanzas (1964-1967), del Interior (1967-1970) y de Asuntos Exteriores (1974-1975). En 1976 fue elegido líder del Partido Laborista y asumió, tras la renuncia de Wilson, el cargo de primer ministro hasta 1979, año en el que perdió las elecciones frente al Partido Conservador, dirigido por Margaret Thatcher. Un año después presentó su dimisión como líder de los laboristas.


James Callaghan

Nacido en el seno de una familia humilde, a los diecisiete años trabajaba dentro de la administración pública en funciones de cobros. A partir de 1936 desarrolló una intensa actividad en los sindicatos obreros. Durante los años de la Segunda Guerra Mundial sirvió en la Marina Real; finalizado el conflicto bélico, dio sus primeros pasos en la política, donde su carrera sería verdaderamente vertiginosa.

Desde 1945 ocupó un escaño en la Cámara de los Comunes, dentro de las filas del Partido Laborista, en representación del distrito electoral de Cardiff South, en Gales. En sus primeros años, hasta 1951, desempeñó diversos puestos en el Ministerio de Transporte y en el Almirantazgo. Su fulgurante ascensión se produjo durante los dos gobiernos del primer ministro laborista Harrold Wilson (1964-1970 y 1974-1976). En el primer gabinete, entre 1964 y 1967, ejerció como ministro de Finanzas, puesto del que dimitió tras las dificultades financieras que atravesó el país, que le obligaron a devaluar la libra esterlina. En el segundo mandato (1974-1976), Wilson le confió la cartera de Asuntos Exteriores.

En 1976 se convirtió en líder del los laboristas, sucediendo a Harrold Wilson, y ostentó desde entonces el cargo de primer ministro. En realidad su elección fue producto de los problemas internos de la formación: de todos los candidatos que podían acceder al liderazgo, Callaghan era el que menos oposiciones y disensiones creaba entre sus compañeros. Durante su mandato (1976-1979), los principales problemas siguieron proviniendo del terreno económico. La debilidad gubernamental a la hora de tomar determinadas decisiones se debía a que su partido no había obtenido una amplia mayoría en la Cámara de los Comunes, lo que creó la necesidad de apoyarse en un primer momento en los liberales y, más tarde, en el Partido Nacionalista Escocés (SNP).

Con una situación económica tan complicada, Callaghan no pudo plantear todas las medidas políticas que hubiera deseado. Su imagen pública descendió hasta niveles ínfimos durante los años 1978 y 1979, cuando tuvieron lugar una serie de huelgas importantes que paralizaron las atenciones hospitalarias y otros servicios esenciales. Este desolador panorama, más la dura oposición del Partido Conservador, dirigido por Margaret Thatcher, condujo a la caída de su gobierno después de un voto de censura, el primero que se registraba desde 1924. Un año después, en 1980, dimitió también como líder del Partido Laborista. Le sucedió en el puesto Michael Foot.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].