Pietro Aretino

(Arezzo, 1492 - Venecia, 1556) Escritor italiano. Tras una inquieta adolescencia y parte de su juventud vivida en Roma, donde fue protegido por los papas León X y Clemente VII, inició su carrera de escritor escandaloso por las cortes de Europa; Carlos V y Francisco I se disputaron los favores de su incisiva pluma. Dentro de su vena calumniadora destacan las Pasquinadas y los Juicios. Son célebres sus Sonetos lujuriosos, compuestos para acompañar los dibujos de Giulio Romano. También escribió para el teatro piezas como La cortesana (1526) o El hipócrita (1542), que hacen un retrato de los vicios. Sus Diálogos (Ragionamenti, 1534-1538) fueron traducidos al castellano en 1548 con el título de Coloquio de las damas.


Pietro Aretino

Nacido en una familia humilde, Pietro Aretino se trasladó siendo aún adolescente a Perusa, donde se inició en la pintura, aunque con poca fortuna, y en la literatura, publicando su primera colección de versos, Opera nova (1512). En 1517 marchó a Roma y allí consiguió entrar en la corte de Agostino Chigi, un rico mercader y banquero, y luego en la del papa León X. Enseguida se dio a conocer como autor de sátiras, de textos escandalosos y de feroces pasquines que le hicieron muy popular, entre ellos sus Pronósticos (1521-1522), una especie de calendarios de la época, las Lettere volanti (1522), de argumento político, o los Sonetos lujuriosos (1525), de tono erótico y lascivo.

Sin embargo, también se ganó numerosos enemigos y por ello, a pesar de contar con protectores como Julio de Médicis, que se convirtió luego en el papa Clemente VII, en 1527, después de sufrir un intento de asesinato, decidió abandonar Roma y trasladarse a Venecia. En el ambiente más libertario y tolerante de esta ciudad encontró el lugar adecuado para su temperamento y allí se quedó el resto de sus días. Obtuvo protección y asignaciones económicas de las personalidades más importantes, como el dux Andrea Gritti, Alejandro de Médicis, Francisco I de Francia o Carlos V, pero también de numerosos príncipes, señores y cortesanos que deseaban ser elogiados y exaltados en sus escritos y, al mismo tiempo, evitar ser objeto de sus satíricos ataques.

En Venecia conoció también a los literatos y artistas más importantes de su tiempo, como Tiziano, Miguel Ángel, con el que mantuvo una intensa relación epistolar, o Ariosto, que llegó a definirlo como "el flagelo de los príncipes". El mejor testimonio de sus vivencias en ese período se halla en los Ragionamenti (1538), en los que utiliza el género típicamente renacentista del diálogo para exponer de manera algo obscena la vida amorosa y galante de las cortes, y en los seis volúmenes de las Cartas (1538-1557), que representan uno de los documentos más interesantes de la vida y la cultura del siglo XVI y que, al estar escritas en forma de "artículos", han sido consideradas como la primera manifestación, aunque embrionaria, del periodismo.

A lo largo de su carrera literaria Pietro Aretino cultivó numerosos géneros, entre ellos el religioso, en obras como La humanidad de Cristo (1535), Génesis (1538), Vida de la Virgen María (1539) o Vida de Santo Tomás (1543), todas con una gran tensión verbal y un cierto estilo prebarroco. Produjo también distintas rimas de amor, como La Marfisa (1535) o Las lágrimas de Angélica (1538), y dos parodias de heroicos poemas caballerescos, Orlandino (1540) y Astolfeida (1547).

Pero donde sus dotes literarias alcanzaron las cotas más altas fue en cinco de sus comedias: La cortesana (1526), Il marescalco (1533), La Talanta (1542), El hipócrita (1542) y El filósofo (1546). Su originalidad reside en que no están inspiradas en los modelos clásicos, que era lo habitual en aquellos tiempos, sino en la observación de la vida real, por lo que están repletas de escenas costumbristas y manejan un lenguaje muy variado. Compuso una única tragedia, La Horacia (1546), que figura entre las obras más importantes del teatro trágico italiano del siglo XVI.

Por su pose antiliteraria y nada pedante, por su orgullo de hombre hecho a sí mismo sin haber seguido estudios regulares y por su singular experiencia autobiográfica, pero también por su exuberancia verbal y su capacidad para la inventiva y la polémica, Pietro Aretino fue un escritor muy apreciado por los autores románticos. Su espíritu libre y despreocupado lo llevó no solamente a escribir sátiras violentas y textos obscenos, sino también a oponerse ferozmente a los dictámenes del clasicismo del siglo XVI, por lo que fue considerado el prototipo del llamado "antirrenacimiento".

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].