Pierre-Jean Jouve

(Arras, 1887 - París, 1976) Escritor francés. Influido por la escuela simbolista en sus primeros libros de poemas (Presencias, 1912; Hablar, 1913), a partir de su conversión al catolicismo (1924) reflexionó en sus obras poéticas sobre la doble naturaleza del hombre, prisionero de los instintos pero atraído por la espiritualidad: El paraíso perdido (1929), Sudor de sangre (1934), Diadema (1949), Reflejos (1962). Dentro de una tendencia similar, escribió también novelas: Paulina 1880 (1925), Catalina Crachat (1947).


Pierre-Jean Jouve

Pierre-Jean Jouve aprendió música bajo la enseñanza de su madre durante toda su infancia y descubrió la poesía a los dieciséis años, durante una enfermedad, en cuyo transcurso se empapó de la lírica de Baudelaire, Rimbaud y Mallarmé. Desde 1906 hasta 1908 creó una revista simbolista: Les bandeaux d'or. Se trasladó a París en 1909, donde se relacionó con los escritores del «Grupo de la Abadía» y conoció el ideario unanimista. Durante este período, la influencia de los mencionados grupos, y también la de Walt Whitman, quedó reflejada en su poesía Les Aéroplanes (1911).

La Primera Guerra Mundial (1914-1918) lo marcó profundamente. En esos años hizo amistad con Romain Rolland, a cuyo pensamiento se adhirió, y publicó algunas colecciones de poesía pacifista: Poème contre le grand crime (1916), Danse des morts (1917) y Tragiques (1922). Hacia 1924, después de un largo período de lectura y meditación, Pierre-Jean Jouve se convirtió al catolicismo; decidido a dar un nuevo impulso a su obra, renegó de todo cuanto había escrito y publicado hasta entonces.

Los primeros resultados se reflejaron en Las bodas (1928), una obra en parte nueva y en parte reescrita, pero sobre todo con Sudor de sangre (1934), que significó un vuelco fundamental de su pensamiento y de su poesía, debido en gran parte a la influencia de la teoría y la práctica del psicoanálisis experimentada por él mismo, ya que su esposa era psicoanalista. Esta obra fue precedida de un ensayo titulado Inconscient, spiritualité et catastrophe, considerado como uno de los más importantes manifiestos poéticos contemporáneos. A diferencia de los surrealistas, con quienes tuvo evidentes puntos de contacto, Pierre-Jean Jouve intentó integrar la exploración del inconsciente y los datos oníricos con una gran confianza en el papel "santificante" de la poesía y una necesidad de tipo religioso, ámbito en que se percibe la influencia de místicos cristianos como Francisco de Asís, Catalina de Siena y Teresa de Ávila.

Su obra siguió luego creciendo con nuevos poemarios: Materia celeste (1937), La virgen de París (1947), que incluye algunos bellos poemas sobre la Resistencia escritos en Ginebra durante la Segunda Guerra Mundial, Lírica (1956), Melodrama (1957), Invención (1958), Moiras (1963) y Tinieblas (1965). Sus grandes temas fueron el eros, la muerte y la angustia. Tuvo una visión apocalíptica del destino humano, que se materializó en imágenes de sangre, de cólera y de pecado, de los cuales debería brotar la epopeya de la libertad y la salvación. Su técnica fue muy variada, abarcando del soneto al verso de estrofa libre. En algunas frases largas se acercó a la prosodia de Saint-John Perse, con quien también se le comparó por otros aspectos. No fue un poeta fácil, pero su obra tuvo una gran influencia en la nueva poesía francesa.

Desde Paulina 1880 (1925) y Le monde désert (1927) hasta La scène capitale (1935), las novelas de Jouve, en su conjunto, estuvieron estrechamente ligadas a la evolución de su poesía y de su pensamiento, mientras que En miroir (1954), definida como un «diario sin fecha», está inspirada en su experiencia interior. En 1951, en Salzburgo, Pierre-Jean Jouve escuchó el Wozzeck de Alban Berg y quedó muy impresionado, hasta el punto de publicar en 1953 un nuevo ensayo musical: Wozzeck ou le novel opéra. El primero de estos ensayos, sobre Don Giovanni de Mozart, databa de 1942. Escribió también sobre literatura -Tombeau de Baudelaire (1942)-, crítica de arte -Défense et illustration, (1943)- y tradujo a Hölderlin y a Shakespeare. En 1962 recibió el Grand Prix Nationale des Letres y en 1966 el Grand Prix de Poésie de la Academia Francesa.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].