Gabriel García Márquez

 
La consagración. Luego de vivir en Caracas, Cuba, Nueva York y México, Gabriel García Márquez comenzó a escribir en 1965 su obra más importante: Cien años de soledad, que le llevó dieciocho meses de arduo y angustiante trabajo, pero con la que consiguió la consagración total e inmediata: más de cincuenta ediciones sucesivas en lengua castellana, con tiradas de hasta un millón de ejemplares, traducciones a infinidad de idiomas, incluido el chino, y de la que Pablo Neruda opinó: "es la mejor novela que se ha escrito en castellano después del Quijote". Su universo es el tiempo cíclico, en el que suceden historias fantásticas: pestes de insomnio, diluvios, fertilidad desmedida, levitaciones. Es una gran metáfora en la que se narra la historia de las generaciones de los Buendía en el mundo mágico de Macondo, desde la fundación del pueblo hasta la completa extinción de la estirpe, y en la que a la vez se cuenta de manera insuperable la historia colombiana desde la independencia hasta los años treinta del siglo XX.