Gengis Kan

 
La conquista de Asia. Dueño absoluto de toda Mongolia, Gengis Kan se dispuso a crear una auténtica maquinaria de guerra dispuesta a arrollar a todos los ejércitos que le salieran al paso. Para ello levantó un verdadero estado armado, en el que cada hombre, tanto en tiempos de paz como de guerra, estaba movilizado desde los quince años hasta los setenta. Las mujeres también fueron incluidas en la organización del estado armado mongol; trabajaban en la producción de alimentos y en la confección de todo tipo de material bélico para las tropas. El objetivo de tal andamiaje social, político y militar era el fabuloso imperio de China, detrás de la Gran Muralla. En 1211 concentró a todas sus fuerzas y dirigió su poderoso ejército contra la China del norte. La campaña acabó en 1215, con la caída de Pekín. En 1219, como venganza por el asesinato de unos caravaneros mongoles, envió un ejército contra el gran imperio musulmán de Karhezm, gobernado por el sultán Mohamed, que englobaba los actuales países de Irán, Irak y gran parte del Turkestán occidental. Gengis Kan no tuvo piedad, y arrasó las florecientes ciudades de Bujara y Samarcanda, hazaña que le confirió una fama de espantosa ferocidad que el general supo aprovechar para conquistar nuevos territorios sin apenas entrar en batalla. En la imagen, una representación de guerreros mongoles de la época.