Gracia Querejeta

(Gracia Querejeta Marín; Madrid, 1962) Directora de cine española. Hija de la diseñadora de vestuario María del Carmen Marín Maiki y del productor cinematográfico Elías Querejeta, cursó estudios universitarios de Geografía e Historia y se licenció en la especialidad de Historia Antigua. Aunque nunca quiso ser actriz, tuvo dos apariciones circunstanciales delante de las cámaras: la primera, cuando sólo tenía siete años, en la película Las secretas intenciones de Antxon Eceiza, y la segunda cuando, a los trece años, interpretó un pequeño papel en Las palabras de Max, de Emilio Martínez-Lázaro.


Gracia Querejeta

Su primera experiencia profesional detrás de una cámara fue como auxiliar de dirección en Dulces horas (1981), a la órdenes de Carlos Saura y con su padre como productor. Después de terminar la carrera tuvo la oportunidad de dirigir en 1988 Tres en la marca, dentro del proyecto colectivo Siete huellas, con el que obtuvo el Premio Teatro Arriaga de Bilbao. La película Siete huellas, realizada por siete directores y producida por Elías Querejeta, estaba compuesta por siete mediometrajes de media hora de duración, realizado por cada uno de los directores, y fue ofrecida en capítulos por el segundo canal de TVE a finales de 1990.

Posteriormente realizó junto a Nacho Pérez y Jesús Ruiz el documental El viaje del agua (1990), premio Goya al mejor cortometraje en su edición de 1991, y un capítulo de la serie El hombre y la industria, emitida por televisión. En octubre de 1992 presentó en la 37 Semana Internacional de Cine (Seminci) de Valladolid su primer largometraje, Una estación de paso, producido por su padre, Elías Querejeta, que también firmó el guión de la cinta. Protagonizada por Omero Antonutti y Bibi Andersson, y contando con actores como Joaquín Almeida, Santiago Alonso y Luis Crespo en el reparto, la película fue galardonada con el Premio Especial del Jurado (homologable al máximo premio que se concede en la Seminci, la Espiga de Oro).

Una estación de paso es un cuadro intimista en el que se refleja a un amplio conjunto de personajes, organizados a modo de un puzzle cuyas piezas van encajando con ordenada y minuciosa precisión hasta componer un paisaje armónico. El argumento gira en torno a un adolescente que va descubriendo su entorno, se interroga sobre los que le rodean, bucea en secretos de la infancia, se inmiscuye en la intimidad ajena y trata de encontrar, a fin de cuentas, una coherencia que le permita la clarificación del misterio, el abandono de los mitos y el acceso a la madurez. Es una película, por tanto, que habla del final de la inocencia, del crecimiento moral, del desgarro emocional de cómo se sufre en la encrucijada y de todo lo que se va perdiendo en el camino.

Su siguiente trabajo fue el ambicioso proyecto El último viaje de Robert Rylands (1996), un filme rodado íntegramente en Oxford (Gran Bretaña) con reparto inglés, cuya historia está basada en la novela de Javier Marías Todas las almas; el resultado no fue del agrado de la crítica ni del público, obteniendo escasa repercusión. En Cuando vuelvas a mi lado (1999), historia de tres hermanas que se reencuentran tras el fallecimiento de la madre, Gracia Querejeta llevó a cabo un gran trabajo de dirección de actrices; la cinta recibió un premio Goya a la mejor fotografía.

También obtuvieron merecidos reconocimientos Héctor (2004), protagonizada por la actriz Adriana Ozores y galardonada con el premio a la mejor película en el Festival de Cine de Málaga, y Siete mesas de billar francés (2007), con Maribel Verdú en el papel principal y diez nominaciones a los premios Goya. Gracia Querejeta ha dirigido además diversos documentales para Televisión Española (TVE) y para la serie de películas documentales El ojo de la cámara, producida por su padre.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].