Francisco de Goya

 
El coloso, o El pánico
1808 - 1812
Lienzo. 1,16 x 1,05
Museo del Prado, Madrid.

Con la llegada del nuevo siglo, Goya se convertirá en un lúcido cronista que describirá como nadie el esperpento, la violencia y, en definitiva, la terrible realidad que le rodeaba. Se trata del Goya expresionista de las "pinturas negras". Un preámbulo de esta serie de pinturas es el lienzo que lleva el título de El coloso o El pánico, realizado hacia 1810-1812 y conservado en el Museo del Prado.

Este enigmático lienzo (que plasma todavía, sin duda, las pesadillas de la guerra) anuncia, pues, por su técnica y ambiente, las visiones que en los últimos años de la vida del pintor alcanzarán su punto de máxima expresividad. La verdadera significación e intención temática de este lienzo es aún imprecisa. Algo colosal y terrorífico se yergue frente a la desamparada humanidad y la pone en fuga. Sólo un asno, estampa de la ignorancia y la inconsciencia, permanece quieto e impávido.

Se han expuesto múltiples interpretaciones y significaciones del gigante. Hay quienes quieren ver una alusión a Napoleón, otros ven un símbolo de la guerra, el hambre, la crueldad o simplemente el miedo a lo desconocido. En cualquier caso el cuadro nos introduce en el mundo sombrío en que se nueve el Goya de los últimos años. Y por contraste nos revela también delicadezas y sabidurías de ejecución, con ligeros empastes dados con espátula y golpes vigorosos de pincel, de magistral modernidad. El cuadro entró en el Museo del Prado en 1930 con el legado Fernández Durán.